Querida Santa Rita:
Te abrimos las puertas de nuestro corazón de par en par, para que vos con tu presencia nos contagies tu fe en Jesús y tu Pasión por hacer realidad su Reino día a día.
En el año de la Vida te pedimos querida Rita que nos esforcemos por cuidar, alentar, acompañar y defender la Vida: la que late en las embarazadas, los niños, los jóvenes, los ancianos, en los que sufren y se sienten solos.
Que tu visita nos ayude a cambiar. Que descubramos la presencia de Dios y las huellas de su Reino. Que como vos busquemos y encontremos a Jesús en la vida de cada día. Que como vos, busquemos el encuentro y nos interese el bien del otro y el bien de todos. Que en esos gestos cotidianos de cariño y
atención mostremos el amor de Dios. Que como vos nos animemos a sembrar las semillas del Evangelio, para que crezcan en nuestra Comunidad. Que desacomodándonos y uniendo nuestras manos seamos levadura de vida nueva, señales de un mundo fraterno.
Fuiste niña, joven, esposa, madre, religiosa, y conocés como nadie el dolor, la alegría y la esperanza de la gente. Rita, Santa de los Imposibles, con confianza pedimos a nuestro Buen Padre Dios por tu intercesión: ... (los vecinos expresan sus oraciones de acción de gracia o petición) Cuidá nuestra familia, nuestra Comunidad, nuestra Patria. Y que el Dios de la Vida que es Padre, Hijo y Espíritu Santo nos bendiga. Amén.